El gato y sus Locuras

En mas de una ocasión hemos recibido la consulta de un propietario comentandonos que su gato esta loco o hace locuras, saltos, mordisco, arañazos. Su gato no está loco, su gato tiene una personalidad única, extravagante, curioso y metódico.
El gato adulto tiene su comportamiento en relación al ambiente familiar donde creció, cuando hace algo “anormal” enseguida lo notamos en su comportamiento, el gato no está loco, el gato está estresado, se ha modificado la rutina en casa y él lo detecta modificando su comportamiento. Hemos de localizar la causa que lo estresa.
Que conductas pueden considerarse normales o casi normales.
El gato tiene una predisposición de beber agua del grifo, bien fresca y en movimiento, su carácter aventurar triunfa y prefiere subirse al fregadero y buscar el agua que beber es aburrido plato. Deberemos cambiar de dos a tres veces el agua del plato.
El frotarse contra nuestras piernas no solo nos demuestra su afecto también tiene un marcaje, las glándulas situadas a ambos lados de la cara, al frotarse nos impregnan de feromonas, nosotros no lo apreciamos pero otros gatos si sabrán que “este humano “ le pertenece.
Un día el gato le dá por lamernos, su lengua aspera la notamos sobre nuestra piel, debe considerarnos algo sucio y por eso nos lame, es buena señal porque nos considera su igual. Es normal el aseo entre gatos, es una forma expresiva de amor y compañía que solo lo hacen entre gatos que tiene un gran lazo de unión entre ellos.
Cuando nos amasa con sus zarpitas, está recordando su época de bebé, se siente protegido a nuestro lado, sintiendo una sensación placentera.
Llegamos a casa y no vemos a nuestro gato, pasamos la puerta y zas, se lanza a nuestras piernas mordiéndonos y arañándonos. Esta manía es propia de gatos que se aburren por pasar solos mucho tiempo. Es un simulacro de caza donde libera la energía acumulada por la inactividad.
Todas estas acciones son totalmente normales, nuestro gato no está loco, simplemente hace locuras.